viernes, 22 de marzo de 2019

Bajo Acústico y Eléctrico

Origenes del Contrabajo


Haciendo un poco de historia es en el siglo XVI en donde nos encontramos con el LIRONE o ARCHIVIOLA DA LIRA, llamada también ACCORDO, el cual era un voluminoso instrumento de arco perteneciente a la familia de las violas, que llegó a poseer hasta 24 cuerdas, varias de las cuales estaban situadas al lado del diapasón a manera de bordones, lo que hacía la ejecución bastante incómoda por lo que su número fue prontamente reducido a 12 y más tarde a 6 cuerdas afinadas a la octava grave de la viola da gamba: re, sol, do, mi, la y re, tomando el nombre de Violone. (En italiano la terminación "one" es aumentativo). Este instrumento con el cual se obtenían unos estupendos bajos fue paulatinamente cayendo en el olvido, y a lo largo del siglo XVII los compositores se quejaban de este abandono injustificado y todavía a principios del siglo XVIII estos no encontraban razón alguna para que el VIOLONCELLO, sucesor de la Viola da Gamba, fuese el único bajo de cuerda utilizado en la orquesta. La insistencia de los compositores terminó por tener buena acogida y pronto un nuevo instrumento de cuatro cuerdas llamado Violone se instalaría en la orquesta definitivamente. Desde su creación, el contrabajo sufrió constantes evoluciones tanto en el encordado como en su afinación. Al principio sus cuatro cuerdas estaban afinadas por quintas a la octava grave del Violoncello lo que producía dificultades de digitación. Seguidamente y durante mucho tiempo se fabricaron contrabajos de tres cuerdas con distintos tipos de afinaciones con lo cual se lograba solucionar algunos problemas técnicos pero generaba otros en cuanto a interválica. Sólo en 1832 Cherubini, entonces director del Conservatorio de París, y Habeneck, inspector general de estudios, decidieron adoptar definitivamente la enseñanza del contrabajo de cuatro cuerdas: Mi, La, Re, Sol, tal como se emplea actualmente. Debemos agregar que en cuanto al encordado, las cuerdas eran en un primer momento de tripas (vísera de animal) las que emitían un sonido bastante opaco aunque profundo, pero con poca  proyección, y estaban amarradas al tiracuerdas en la parte posterior y enrrolladas en el clavijero, el cual era de madera de ébano y de tipo llave, similar a los actuales violines; actualmente son de bronce y algunos instrumentos poseen microafinadores. Con el tiempo tanto este tipo de cuerdas como el contrabajo de tres cuerdas fue desterrado de las grandes orquestas, utilizándose sin embargo durante bastante tiempo en pequeñas orquestas de baile. Actualmente existen contrabajos de cinco cuerdas que surgieron como respuestas a las exigencias de la música Wagneriana. Esta cuerda es una tercera mayor más baja que la cuarta cuerda de afinación normal -o sea, un Do- ya que anteriormente la cuarta cuerda debía ser bajada y por lo general no sonaba bien al estar en exceso flexada. El problema quedaría definitivamente solucionado con la aparición de los instrumentos de cinco cuerdas. Do, Mi, La, Re y Sol (de abajo hacia arriba) y también con el diseño y construcción de un encordado especial para estos instrumentos. En general las actuales orquestas emplean siempre contrabajos de 4 cuerdas a las que se agregan algunos instrumentos de cinco.

El Contrabajo en la música del Siglo XX:


Al entrar en la música del JAZZ el contrabajo, ya maduro en su evolución, entraría a formar parte de la llamada sección rítmica de las agrupaciones  emergentes ya que al ser pulsado con los dedos en forma de Pizzicatto otorga al contexto una riqueza rítmica y una pulsación difícil de lograr con otros instrumentos de registro grave; adquiere también una mayor libertad en su accionar sin perder su función vital de sustentar la base armónica haciendo de puente entre la sección rítmica y melódica-armónica pero adquiriendo a la vez un mayor protagonismo tanto en el acompañamiento como en la participación de solos a veces bastante extensos. El JAZZ es actualmente un lenguaje enriquecido según algunos y contaminado según otros por una gran diversidad de fusiones de estilos, tendencias y conceptos nuevos que se le suman día a día; por lo tanto a la hora de nombrar a los grandes exponentes del contrabajo se puede pecar de parcialidad regida por el ánimo del momento; sin embargo, existen algunos contrabajistas de JAZZ que de alguna manera siempre están presentes en la memmoria de los aficionados o profesionales de este instrumento. Cómo no recordar por ejemplo, a Scott Lafaro que en su musicalidad y riqueza melódica se transformó en uno de los primeros grandes y audaces solistas de su época; a Ron Carter, un maestro en cuanto a pulsación y el manejo de las pulsaciones armónicas; Ray Brown, en cuanto a profundidad y peso del sonido; Charles Mingus en la composición de grandes blues, gran expresividad, sonido y pulso; Eddie Gomez, gran poeta, virtuoso y de gran riqueza melódica y armónica, y con manejo de las tensiones rítmicas; Miroslav Vitous, grandioso en el manejo del arco, virtuosismo, pulso y vitalidad; Neils Petersen, solista de gran solvencia; Dave Holland, musicalidad y expresión. Lamentablemente, con el hecho de nombrar a algunos se corre el riesgo de dejar a otros fuera, como el gran número de los contrabajistas de las Big Bands, combos y otras agrupaciones menores.

El Bajo Eléctrico
Fender Precision -1951
El bajo eléctrico aparece en la música popular durante la década de los años cincuenta en plena era de Rock n' Roll, cuando el contrabajo de concierto que también se utilizaba en la música popular tocado en forma de pizzicato (pulsado con los dedos) se va viendo cada vez más exigido por el avance de la electrónica, ya que la guitarra eléctrica estaba en plena vigencia así como también órganos y pianos eléctricos a través de los cuales se investigaba cada vez más en la perfección de equipos de sonido para estos y otros instrumentos. Aunque era posible amplificar el bajo acústico, este no rendía el peso sonoro sobretodo durante las actuaciones en vivo para sustentar a un cuarteto de Rock n' Roll, Country o Blues. El Rock n' Roll era cada vez más popular y las giras de los grupos en USA eran cada vez más intensas, por lo tanto el traslado del instrumento debido a su tamaño y fragilidad lo hacía diicil y costoso. Pensado para desempeñar la misma función que el bajo acústico e inspirado en la construcción de la guitarra eléctrica, , el cual quedaba colgado al cuerpo del músico en forma perpendicular (igual a la guitarra) careciendo así de puntal y sus medidas fueron sintetizadas para hacerlo más anatómico. Los principios de amplificación eran básicamente los mismos de la guitarra es decir por medio de cápsulas magnéticas instaladas debajo de las cuerdas en la parte central del cuerpo. Este bajo poseía también entrastadura por lo tanto era de afinación fija que lo hacía aparentemente más fácil de tocar. En resumen era igual a una guitarra eléctrica pero con cuatro cuerdas más gruesas, las cuales se afinaban a la octava de las cuatro últimas cuerdas de la guitarra: Sol; Re;La;Mi. De ahí posiblemente el nombre que adoptó: guitarra baja (Bass guitar). Fue Leo Fender quién en 1951 lanzó por primera vez un intrumento de este tipo y lo denomino Fender Precision y el nombre no es casualidad: frente a los tradicionales contrabajos, con la tabla del mástil completamente lisa, el nuevo instrumento incorporaba trastes, al igual que las guitarras española y eléctrica, esta última también inventada por Fender, junto a Rickenbacker y Gibson. Parece una tontería, pero el detalle de los trastes hace que la afinación del Bajo sea mucho más "precisa", de ahí el nombre de Precision. Pero la revolución fundamental que representa el bajo eléctrico frente al contrabajo es la de la amplificación del sonido y su portabilidad. Luego en el verano de 1960 Fender lanzó un segundo intrumento que denomino Fender Jazz Bass que a diferencia de su antecesor contaba con dos juegos de captadores o micrófonos uno en la parte central del cuerpo y el otro cerca del puente, un control de tono y dos controles de volumen individuales. Desde el punto de vista del sonido el Jazz Bass posee uno más brillante, contrario al oscuro y profundo del Precision,  debido fundamentalmente al captador que está próximo al puente. Por otra parte el Jazz Bass, gracias a los controles de volumen individuales para cada micrófono, permite dar distintos balances entre ambos y obtener así diferentes matices sonoros.
Fender Jazz Bass -1960
Aunque este instrumento se popularizó tanto que desplazó de la escena musical a sus antecesores por la comodidad y funcionalidad que otorgaba al bajista, tardaría más de veinte años en incorporarse al Jazz. Recién en 1970 fue Miles Davis quien lo lleva a este lenguaje causando una verdadera revolución en el sonido jazzístico de la época. Sin embargo como los procesos son siempre graduales, este bajo ya había madurado dentro de la misma música negra, en el Soul, como también el Blues y el Rock hacia fines de los sesenta, en donde ya empezaban a emerger figuras que marcarían puntos de referencia. En la actualidad es un instrumento que ha alcanzado un gran protagonismo en el aspecto del solista sin perder su función básica y original de sustentar a la banda. La aparición de bajos eléctricos fuera del díseño oríginal ha contribuído a la creación de nuevos conceptos de ejecución. Instrumentos como el eléctrico vertical, el Frettless (Sin trastes)y el bajo de 5 y 6 cuerdas, han sido popularizados por los grandes y famosos exponentes que todos conocemos, sin embargo, los origenes de estos no resultan ser tan nuevos o actuales como pudiera parecer. Stanley Clarke Con anterioridad al famoso 6 cuerdas de John Patitucci existía un modelo de la Fender hace más de 2 decádas que seria prácticamente el padre del actual, sin embargo Patitucci contribuyó con gran acierto al aspecto solista del cual Pastorius sin duda es el más grande. El bajo Frettles popularizado por este último habría tenido sus orígenes dentro de la música tropical o latina hace ya varias décadas. Hoy existe una gran variedad de bajos eléctricos hasta de 8 cuerdas dobles y singles.

Técnicas de Ejecución

Existen varias formas de tocar el bajo eléctrico, además de la ya conocida técnica de "pizzicatto" con los dedos utilizada tambien en el contrabajo.En tal sentido podemos agregar la técnica con púa y la técnica de Slap Popping. La primera consiste en la utilización de un plectro o púa de material plástico o metálica para percutir las cuerdas.En la segunda se utiliza la mano derecha para lograr un sonido de chasquido que resulta ser muy rítmico .Los dedos que se utilizan son: la parte exterior del pulgar, con la que se golpea la cuerda sobre el mástil (en el último tramo de este, aproximadamente sobre el traste #20) y el índice, con el que literalmente se hace restallar la cuerda contra los trastes, esto se consigue, levantándola con la yema del dedo, separándola del mástil y después soltándola bruscamente. Por otro lado, con la mano izquierda se pulsan las notas como siempre más el agregado de las llamadas "notas muertas".Estas últimas se consiguen apoyando la mano sobre la cuerda asordinándola e impidiento que vibre.

Bajos Sintéticos

Moog Taurus
La idea de ejecutar líneas de bajo desde intrumentos de teclado la podemos encontrar a fines de los años cincuenta con la aparición del Fender Piano Bass. Sin embargo, no es hasta la aparición comercial de los sintetizadores a fines de los 60´ y el auge de la música electrónica que esta idea se hizo popular. Uno de los sonidos de bajo sintético más famoso proviene de la línea de sintetizadores Moog, pero virtualmente cualquier sintetizador puede generar uno.Otro instrumento muy usado es el Roland SH-101 y otro, de esta misma marca, es el TB-303 aparecido a principios de los 80´.


TB-303
Este último consistía en un sintetizador que proveía 2 formas de onda básicas (Diente de Sierra y Cuadrada) más un secuenciador y un filtro resonante elemental. El compás se divide en 16 pasos y no tiene un teclado tal como los conocemos ya que en relidad es solo una botonera dispuesta de la misma forma que las teclas en un piano con una octava de extensión. La líneas de bajo de este tipo son muy populares en la música electrónica actual como Dance, Acid House, Trance, Tekkno etc. Debido fundamentalmente a su forma de programación las líneas de bajo de la TB-303 son utilizadas más allá del solo hecho de acentuar la armonía y el ritmo obteniéndos efectos (como los barridos de filtro y los arpegios) que no pueden lograrse tan facilmente con bajos eléctricos o acústicos.


Audio
Relacionando los sonidos de bajos con el mapa de General Midi podemos encontrar el programa Nº 33 (Contabajo), el Nº 34(Eléctrico con dedos), el Nº 35 (Eléctrico con púa), el Nº 36 (Bajo fretless), el Nº 37 y 38 (Bajo con técnica de Slap) y el Nº 39 y 40 (Bajos generados con sintetizadores)



No hay comentarios:

Publicar un comentario